La diabetes es una enfermedad que impide al organismo procesar correctamente los niveles de glucosa en sangre. La glucosa, que no es otra cosa que el azúcar que recibe nuestro cuerpo procedente de la comida y bebida que ingerimos, se almacena de manera excesiva en las personas diabéticas y produce problemas en diferentes órganos.
Varios estudios desvelan que cerca de 400.000 personas son diagnosticadas de diabetes cada año en España. Por tanto, saber si hemos desarrollado dicha enfermedad y tenerla controlada es fundamental.
Además de los órganos a los que afecta de forma directa, la diabetes puede generar problemas de salud bucodental severos.
Si la glucemia no está controlada, la erradicación de las infecciones bacterianas resulta más complicada. Ante algo tan común como la acumulación de placa dental, pueden producirse infecciones como la enfermedad periodontal.
Enfermedad periodontal y diabetes
Hemos hablado en otras ocasiones sobre la enfermedad periodontal, que sabemos que se manifiesta de dos formas. Una más leve y sencilla de tratar: la gingivitis; y otra mucho más grave y que puede conllevar la pérdida de piezas dentales: la periodontitis.
Algo que para muchas personas es desconocido, es que la diabetes tiene una gran relación con las enfermedades de las encías. De hecho, un paciente diabético tiende a desarrollar con mayor facilidad la enfermedad periodontal.
Y este no es el único peligro. Del mismo modo que la diabetes aumenta las probabilidades de padecer enfermedades de las encías como la gingivitis o periodontitis, estas también funcionan en el sentido contrario. Es decir, que la enfermedad periodontal puede empeorar el control de la glucosa y hacer que la diabetes evolucione de manera negativa.
Como decíamos anteriormente, los diabéticos tienen menos defensas ante las bacterias que se acumulan en los dientes y encías y por eso están más expuestos a las infecciones. Es por ello, que deben tener todavía mayor cuidado con la higiene bucodental que cualquier otra persona.
Cómo saber si mis dientes y encías están afectados por la diabetes
La mejor manera de saberlo es realizando visitas periódicas al dentista. Teniendo en cuenta que el paciente es diabético, será mucho más sencillo tener controlados y prevenir otros problemas relacionados con la salud dental. Por eso, es importante que los profesionales que te tratan tengan conocimiento de ello.
No obstante, si sospechas que puedes haber desarrollado enfermedades de las encías derivadas de la diabetes, deberías poner atención en los siguientes puntos:
- ¿Tienes las encías inflamadas, de color rojizo, o te duelen?
- ¿Has observado que te sangran al cepillarte o durante la noche?
- ¿Tienes problemas de halitosis severa?
- ¿Tus dientes parecen más largos debido a que las encías están retraídas?
Si la respuesta a alguna o varias de estas preguntas es «Sí», no esperes más y pide cita previa en el dentista.
Prevención de las enfermedades dentales por la diabetes
Si el problema todavía no existe, hay que poner todos los medios posibles para que nunca aparezca. Si eres diabético/a debes tener en cuenta algunos aspectos fundamentales para cuidar tu salud, tanto bucodental como del resto del cuerpo:
- Tener controlado el nivel de glucosa en sangre es primordial.
- Cuidar la alimentación. Los alimentos con altos niveles de azúcar son peligrosos, no solo por las carencias de las personas con diabetes a la hora de controlar la glucosa en sangre, sino porque favorecen la acumulación de bacterias en la boca.
- Los hábitos de higiene dental han de ser estrictos. Lavarse los dientes tras cada comida y hacer uso de herramientas como el hilo dental.
- El tabaco también es especialmente malo. Lo es siempre para cualquiera, pero para gente con este problema lo es todavía más. Como señalamos en anteriores artículos, el tabaco triplica las probabilidades de sufrir periodontitis.
- Si llevas ortodoncia, es muy importante que respetes los consejos que te damos sobre las mejores formas de mantener la higiene. Puedes verlos aquí.
- Visita con frecuencia al dentista e infórmate de cualquier cambio que haya experimentado tu diabetes.
